Las excavaciones

En Pompeya ha conservado calles, objetos (desde molinos de grano hasta vajillas y joyas), templos, teatros, termas, patios; como si la ciudad hubiese quedado suspendida en el tiempo, por un lapso de unos 1600 años, hasta que en 1748 comenzaron las primeras excavaciones. Los trabajos oficiales comenzaron el 1 de abril de 1748. Pero fue Johann Joachim Winckelmann, arqueólogo alemán, quien reveló la importancia de descubrimiento de la Pompeya. Desde los primeros hallazgos se han ido revelando gran cantidad de restos, muchos de ellos aun están bajo las cenizas. Se calcula que una cuarta parte de la ciudad queda sin excavar, y la mayor parte de la zona continúa sepultada por tierra amontonada durante las excavaciones más antiguas. En 1912, en una calle que unía la strada dell' Abbondanza con el anfiteatro se encontraron varias casas, cada una con un balcón en el primer piso, de 6 m de largo por 1,5 m de ancho.
Los ataques aéreos durante la II Guerra Mundial dañaron gravemente algunas de las ruinas que han sido restauradas.
Desde comienzos del s. XVIII hasta hoy en día prosiguen los trabajos de excavación de una de las ciudades del mundo antiguo que mejor se han conservado hasta nuestros días.